Las pasarelas de pago son plataformas que permiten a los comercios electrónicos poder aceptar pagos en línea de manera fácil y segura, que con la pandemia se han convertido en la opción más fácil para adquirir bienes y servicios.
En Colombia, las pasarelas de pago aumentaron sus operaciones 64% en 2020 con respecto al año anterior, según cifras de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico – CCCE.
Así mismo, de acuerdo a cifras de Colombia Fintech, más de un billón de dólares se han invertido en esta industria en los últimos tres años. Y cerca de 300 millones, fueron invertidos en el sector, durante los primeros cinco meses de la pandemia.
Más oportunidades
Con el alto número de transacciones online que se manejan actualmente, las pasarelas de pago deben ser lo suficientemente robustas. Con la pandemia, los pagos digitales se han instalado como los favoritos en casi todos los países. Acorde a datos de Visa, el método de pago ganador en Latinoamérica fue el débito, con 72%.
Seguridad contra el fraude
Latinoamérica es una de las regiones con más problemas en cuanto al fraude electrónico, en promedio, un 8% de las transacciones se cancelan por sospecha de fraude, lo que casi duplica el promedio europeo, según datos de Riskified.
Por lo tanto, es relevante que una pasarela de pago cuente con la certificación PCI DSS, normativa que acredita el estándar de seguridad de las principales emisoras de tarjetas, como: American Express, Mastercard y Visa.
El consumidor primero
Los clientes, especialmente las nuevas generaciones, son cada vez más exigentes con los procesos de pago. Ante todo, buscan que las transacciones sean sin fricciones y lo más fluidas posible.
Con una pasarela de pago, es probable incorporar más métodos de pago, como tarjetas de crédito, débito, transferencia e incluso pagos en efectivo. Todo eso, en formatos de escritorio o de pago móvil.
Se estima que un 40% de las compras en e-commerce son impulsivas. Eso, en la generación boomer, en la millennials, la cifra se eleva a un 42% de personas que han realizado compras por impulso en el último mes.
Si contemplamos la vida entera, un 83% de las personas admite alguna vez haber hecho una compra por impulso.
La pasarela de pago digital está disponible 24/7 para satisfacer esas necesidades que existen en la población.
Mayor control y centralización
Con una pasarela de pago, el comercio puede tener toda la información de sus pagos en un solo lugar, lo que lo ayuda en temas de gestión y conciliación de dinero.
Finalmente, tener una pasarela de pagos para hacer compras digitales permite que el comercio tenga el control completo del proceso de compra, minimizando problemas y mejorando la atención a los clientes.
- Fuente: Kushki